domingo, 9 de octubre de 2016

CICATRICES

Hay cicatrices en nuestro cuerpo que nos recuerdan caídas de nuestra niñez. Verlas nos lleva al pasado y de alguna forma revivimos el momento en que nos herimos, hasta parece que volvemos a sentir el dolor que nos provocó en aquel momento. A veces hasta nos genera risas al recordar cómo fue que nos lastimamos. ¿Pero qué pasa cuando esa cicatriz no la tenemos en el cuerpo sino que la tenemos en el alma?

Hay situaciones que hacen que recordemos momentos que nos dolieron y nos recuerdan que ayer sufrimos, lloramos. Nos llevan a momentos de desilusiones, fracasos...¿Cómo levantarnos y hacer que esa cicatriz ya no nos duela?

Es difícil a veces encontrar motivos para seguir adelante y dejar atrás todo aquello que nos dolió, pero si logramos entender que si hoy vemos una cicatriz significa que logramos superar aquella herida y seguir a pesar del dolor, y aprendemos a mirarla de una manera más positiva entendiendo que si hoy estamos en un punto distante de aquel momento es porque pudimos superarlo y nos hicimos más fuertes, podremos darnos cuenta que si nos tocara volver a pasar por la misma situación sin dudas actuaremos de manera distinta porque llevamos en nuestro cuerpo y alma una marca que confirma un aprendizaje y superación de algo  hoy ya no nos puede detener...cada herida del pasado nos hace crecer y nos hace más fuertes.

miércoles, 5 de octubre de 2016

¿Un adiós o una pausa?

En un instante de valentía nos unimos, tomamos nuestras manos con el propósito de no soltarnos jamás.

Luego el miedo se apoderó de mí y quise decir adiós pero tú enfrentaste mi cobardía y me impusiste un tiempo.

Hubo días en que no pudimos ver qué era lo que nos alejaba, la incertidumbre nos invadía y el insomnio no nos dejaba encontrarnos en mis sueños.

La vida nos enredó en su juego y nos alejó pero aún así encontramos un momento para reencontrarnos, aunque ya nada era lo mismo...Yo con mis sueños, tú con tus proyectos.

Creímos que ese era nuestro fin pero fueron más fuertes nuestros sentimientos y aunque ya no éramos uno, juntos caminamos nuestros caminos paralelos.

Somos dos que fuimos uno. Somos dos  que no pueden decir adiós para siempre y buscan cada noche un motivo para no perder la Fé.

El mañana es cuestión de tiempo...un adiós o una pausa aún no logro saber pero aún sigo esperando vencer la confusión para poder abrazarte con el alma otra vez.

pensamiento...

De nada sirve que escribas una historia con dos protagonistas y un final feliz si uno de ellos ya renunció a su papel.