viernes, 29 de marzo de 2019

Mi minuto de fama.

¡Me siento mal! Dije y me levanté de un salto. Me propuse atravesar el laberinto de bancos y sillas pero la puerta de salida se alejaba cada vez más y el lugar se oscurecia poco a poco hasta quedar en plena oscuridad.
De repente abro los ojos y me encuentro tirada a mitad del salon...con una multitud mirándome fijamente y con voz de preocupación me preguntan casi al mismo tiempo, como una melodía casi perfecta, -¿Te sientes bien?. Yo los miro mientras pienso: ¡¡¡Claro que no me siento bien!!! Estaba rodeada de extraños, en un lugar sumamente pequeño, tirada en el piso con mi profesor sosteniendo mis piernas en alto ¡por Dios no podría sentirme más avergonzada! ¿Cómo lo miraría a la cara durante el resto del año sin recordar aquel episodio? (cabe aclarar que el año recién empezaba). Apenas hice una mueca con mis labios y me dispuse a levantarme y entonces fue ahí que descubrí que en mi trayectoria al piso sin dudas me había golpeado la cabeza contra algún banco porque sentí al moverme un dolor tan intenso como el olor al café en las mañanas, un dolor que invadía todo mi cuerpo. No pude ponerme de pie, al ver sangre en mi mano me volví a desvanecer. Ahora sería mayor mi vergüenza.
Luego de unos minutos llegaron los enfermeros y ahí se completó la escena perfecta para el recuerdo de todos los presentes, compañeros y no compañeros. Y al rato el gran final, después de unos minutos de incertidumbre...mi GRAN salida con dos enfermeros escoltandome, tal como dos guardaespaldas, que caminaban junto a mi por el largo pasillo con espectaculares a ambos lados, algunos murmurando que mal se me veía, otros señalandome mientras contaban lo sucedido a alguien que recién llegaba y no entendía nada...en fin ese fue mi minuto de fama que sin dudas quedó en la memoria de muchos y aún más en mi cuero cabelludo con aquella pequeña cicatriz.

jueves, 28 de marzo de 2019

Nunca más!

- ¡¡¡Hoy va a ser un gran día!!!
Me dije a mi misma mirándome al espejo, una mañana al levantarme.
Ansiosa, soñadora e ingenua...sin dudas aquel día iba a ser un gran día...un gran día para olvidar!
Llegué caminando al trabajo, no por elegir un estilo de vida saludable ni por no querer contaminar el medio ambiente. En las horas siguientes todo fue un caos. Y por la tarde nada mejoró.
Al llegar la noche me paré nuevamente frente al espejo y me prometí a mi misma nunca más decir...
- ¡¡¡Hoy va a ser un gran día!!!

lunes, 25 de marzo de 2019

¿Qué es lo que tengo para ofrecerte?

Yo no tengo nada que ofrecerte. En mi sólo encontrarás un corazón remendado, unas cuantas estrías que marcan mi cuerpo. Solo llevo en mi bolso un par de historias a medio escribir, algunos secretos aún guardados y sentimientos nunca contados. Pero de lo poco que tengo me comprometo a regalarte todo...mi silencio en las mañanas, mis pensamientos más furtivos y esa historia de amor de la que siempre escribí pero que  jamás fue vivida.

sábado, 23 de marzo de 2019

¿Qué hiciste hoy?

Sábado a la noche. Me acuesto y disfruto del silencio de la casa. Un silencio que no se da muy a menudo así como tampoco se da que me encuentre a solas con mis pensamientos. Hace ya tiempo que no tengo tiempo para conversar con ellos. Hace tiempo no los escucho ni tampoco les cuento cómo me siento. Pero esta noche es diferente. Esta noche puedo disfrutar de ambos. Ésta noche vinieron y me preguntaron ¿Qué hiciste hoy para ser feliz? ¿Qué hiciste hoy para que tú mañana sea diferente a tu ayer? ¿Y saben qué me di cuenta? Que hoy no hice grandes cosas, no hice nada raro ni emocionante para que los demás me feliciten... sólo hice cosas pequeñas, cosas muy comunes para algunos, pero esas pequeñas cosas a mí me conectaron con mi esencia, con lo que me impulsa, con lo que renueva mis energías. Cosas que puedo compartir con muy pocos, porque muy pocos las entienden. Y otras tantas simplemente me las guardo y las comparto solo con el silencio porque son tan esenciales para mí que me da miedo compartirlas.

pensamiento...

De nada sirve que escribas una historia con dos protagonistas y un final feliz si uno de ellos ya renunció a su papel.