BALANCE DE FIN DE AÑO.

Llega fin de año y es tarea imposible escapar del balance personal del año que termina...Nos examinamos desde el exterior hasta lo más oculto y desconocido. Pensamos en nuestros logros, nuestros fracasos, contamos cuántas lágrimas derramamos y comparamos con la cantidad de risas regalamos y cuantas nos compartieron a lo largo de éstos últimos 12 meses. Miramos nuestro guardarropas y si somos mujeres seguramente creció desmedidamente y aún así no tenemos qué ponernos para la gran cena familiar. Quizás notamos que frente al espejo encontramos pliegues en nuestra silueta que el invierno y sus comidas"de ollas" nos regaló y no quiso llevarse al llegar la primavera. Algunas lo empezamos acompañadas e inexplicablemente ahora debemos quitar un par de cubiertos de la gran mesa.
Para las que estudian seguramente contarán cuántas materias aprobaron y cuántas no, cuanto avanzaron en la carrera.
En fin todo ésto para qué, quizás algunos se vean motivados para seguir adelante el próximo año, otros encontrarán cosas para cambiar. Pero la realidad es que sea positivo para negativo tú balance si eres mujer, jóven, si aún no te has casado ni has tenido hijos...No podrás escapar de las preguntas incómodas de tú abuela o tía mayor...Si estás sola...¿y? ¿Para cuando el novio?...Si te peleaste...¿y tú novio cómo anda? ¿Porque no vino?...Si estás de novia...¿Para cuando el casamiento? ¿y los confites?...¡¡¡Te vas a quedar para vestir santos vos!!! 
La gente no entiende que hoy las cosas cambiaron y que quizás para muchas nuestras prioridades sean otras las prioridades...En fin ¿Como termina ésta historia? al final de la noche, a la hora de brindar, su cuestionario hace efecto y quizás muchas recomencemos a plantearnos cuestiones que creíamos superadas o aprobadas en nuestro balance personal.
¿Porqué estamos otro fin de año solas? ¿En qué fallamos durante el año para no poder empezar y terminar el año junto a esa persona?... Creo que encontré dónde está nuestra falla!! Crecemos oyendo historias de princesas rescatadas de su castillo por príncipes que llegan en su hermoso caballo, en nuestra adolescencia nos pasamos horas viendo novelas donde la chica pobre se enamora del chico rico, delicado, caballero, de perfecta apariencia y se casan en el último capítulo...Pero cuando vamos a la realidad notamos que ese príncipe no existe y aunque nos pasemos toda nuestra vida buscandolo no lo hallaremos. Es así de grandes nos toca chocarnos contra un muro y junto con nosotras cae y muere  nuestro sueño de que Mario Casas llegue en su moto y nos lleve 3 metros sobre el cielo. Seamos realistas por un momento...Hombres buenos, fieles, románticos, detallistas, desinteresados y trabajadores si existen pero saben que a diferencia de los cuentos y novelas acá tienen PANZA!!! Hace poco un amigo me dijo: " Un hombre sin panza es como un cielo sin estrellas" y la verdad me lo estoy empezando a creer.

Que éste fin de año podamos brindar por un nuevo comenzar sin vendas en los ojos que nos permitan ver lo bueno de éste mundo cruel.

Felicidades!!!!